Los Cinco Minutos de María |
Los santos más devotos de la Santísima Virgen han sido los más empeñados en su propia santificación; emplearon la devoción a la Virgen como un estímulo que los empuja a una mayor perfección de vida.
Para ello trataron de imitar las virtudes de la Santísima Virgen, ya que la celestial Señora fue modelo en todas las circunstancia de la vida.
También nosotros llegaremos a conseguir la santidad de nuestra vida si nos proponemos imitar a la Santísima Virgen en sus virtudes; comencemos a hacerlo hoy mismo, no lo dilatemos más, no lo dejemos para más adelante, porque ese momento de más adelante puede no llegar nunca.
María jamás ha abandonado a quien la haya invocado con amor.
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